lunes, 16 de junio de 2008

16 de junio de 2008

Hola. Cuando he abierto el diario y he visto lo que escribí anoche me he llevado una sorpresa. No tengo el más mínimo recuerdo de lo del murciélago y la ventana no está rota. Debí escribir sonámbulo. ¿Cuántas más cosas podré hacer durmiendo y sin darme cuenta si fui capaz de escribir todo eso sin faltas de ortografía? Mi mujer nunca me ha dicho que me levantase sonámbulo, y nunca he dado un susto a mis hijos entrando en su habitación con los ojos en blanco. Seguramente Rigo me mordería si me viera merodear como un zombi por la casa.
Esta mañana, como escribí ayer, ha sido dura. También la tarde. Hoy hemos empezado el rodaje de Terminator 4, sobre la que no puedo decir nada. Ya la veréis. He estado todo el día, porque mi trabajo de gobernador no me permitirá participar en el rodaje más de cuatro semanas.
Han construido un hangar en mi isla para que no tenga que alejarme demasiado, y allí se rodará en formato digital casi toda la película. Yo no tengo que hacer casi nada, porque van a meter efectos especiales para corregirme algunos movimientos y para casi todo lo demás. Adiós a los decorados, que me encataban. Las grutas de la película Conan eran un buen sitio para tontear con las maquilladoras y las actrices de reparto. Pero no solamente ha cambiado esto: yo también soy otra persona distinta. Un poco viejo, no soy un T-101. El agotamiento viene por las esperas, las repeticiones, las luces... Ya no estoy para estos trotes. Pero estoy en forma, no os preocupéis.
Ahora son las nueve de la noche, estoy de vuelta en casa. He comprobado la ventana, normal, y tampoco hay cristales por el suelo. ¿Será posible que mi mujer haya arreglado el cristal hoy? No lo había pensado, pero es bastante probable. Entonces, el cadáver del murciélago debería estar en el suelo del jardín, justo debajo de mi ventana, si es que los gatos no se lo han comido. Soy incapaz de recordar, pero tampoco es algo que tenga importancia. Es más importante descansar, porque mañana será un día tan largo como el de hoy.
He escrito que he estado todo el día fuera pero creo que no he escrito que en casa no hay nadie. Otra novedad. Supongo que mi mujer se ha llevado a mis hijos a ver a su familia. Van a empezar las vaciones de verano para ellos, y siempre quieren ver a su abuela. Será eso, porque aquí no hay nadie. Rigo tampoco aparece.
Un abrazo, me voy a dormir.